lunes, 25 de octubre de 2021

Evitemos los complejos.

 



Sin duda los complejos son uno de los problemas que tiene la sociedad actual. Yo particularmente he tenido la suerte de tener pocos complejos, que también los he tenido, e incluso los tengo pero, vamos a hablar sobre ellos.


Para empezar tenemos que tener claro lo siguiente. ¿Qué es un complejo? ¿Qué es tener un complejo? 


Para mí, tener un complejo es tener malos sentimientos y malas sensaciones con un defecto físico real o ficticio o sentirse inferior por pertenecer a un grupo social, religión, política e infinidad de cosas que te hacen sentir mal por la presión de la sociedad y de tu propia presión.


En mi caso el complejo que he tenido siempre, ha sido a causa de mi enfermedad de la vista. No poder ver bien, no poder estar en las mismas condiciones que el resto de personas me causó y en alguna ocasión me causa complejo. En la época del colegio los alumnos se metían conmigo, y sufrí acoso por mi discapacidad y eso me hizo sentir muy mal. Yo quería hacer lo mismo que ellos pero, no podía. Yo quería leer la pizarra desde lejos, quería leer un libro sin necesidad de gafas, luces, lupas… Yo quería ser normal y eso me causaba muchos complejos. En la adolescencia, quería ir igual de rápido que ellos con la bici, cuando ellos pudieran conducir motos yo no pude, las barreras a la hora de estudiar fueron muchas. A la hora de buscar un trabajo, los problemas crecen sobre manera, me llegaron a decir alguna vez, que no daba el perfil por acercarme mucho a la pantalla, o entrevistas vacías, que cuando se enteraban de la discapacidad dejaba de interesar. Y todo ello te hace sentir muchos complejos en mi caso lo vuelvo a repetir por el lado de la vista. 


Afortunadamente, ese es mi único complejo. He tenido la suerte de no tener ningún complejo de tipo físico, ya que conozco mucha gente que sus complejos son por cuestiones físicas. Muchos de ellos, les molesta el color de su pelo, si me ha salido alguna cana, a otros si están delgados o si están gordos, a otros la falta de pecho.


En definitiva son todos complejos, con el tiempo se pueden superar, es muy importante saber cuál es tu complejo, quitarle importancia, y ser feliz con lo que eres y con lo que puedes llegar hacer.


Si queremos superar los complejos, puedo dar varios consejos que yo he seguido. Uno de ellos es no obsesionarse, no volverse un controlador de tu obsesión. Lo segundo es asumir mi complejo, es decir no esconder ni complejo. Si no veo bien, tan simple como no veo bien.  


La sociedad es una trituradora, que arrasa con todo y exige unos cánones de belleza, inteligencia, perfección… Que hace difícil superar complejos, por eso mismo, uno tiene que ser uno mismo, con tus defectos y tus virtudes, siempre queriendo mejorar y ser mejor persona para ser felices a lo largo del tiempo.


En resumen, para disminuir esa sensación de complejo, lo primero que te recomiendo es que acudas a un profesional, un psicólogo que te ayude a gestionar tus emociones. No obsesionarse y ser un controlador también es un buen consejo. No te dejes arrastrar por la falsa realidad que nos vende la sociedad. 


Disfrutemos de la vida, que solo tenemos una y no podemos perder el tiempo en pasarlo mal.


martes, 5 de octubre de 2021

El juego del calamar.

  Hoy os recomiendo y vamos hablar de una serie de Netflix que está muy de moda, una serie que es una gran crítica al capitalismo, a la moral, a la humanidad en general. La serie en cuestión es “el juego del calamar”.


Esta serie tiene un argumento sencillo, pero con mucho trasfondo y mucho juego. Lo de mucho juego es en serio, ya que la serie trata de unos juegos organizados para personas con muchísimas deudas y con una necesidad muy urgente de conseguir dinero. 


Serie coreana, que con este pequeño argumento está levantando pasiones en todo el mundo, ya que tras su estreno se ha convertido en una de las series más vistas del momento. Algunas cosas que hacen que esta serie te motive, son esos giros de guion dentro de un mismo capítulo, personas que llevamos viendo muchas series algunas veces, somos capaces de predecir lo que puede pasar. En esta serie es cierto que algunas cosas también son evidentes, ya que hemos visto muchas series de tipo acción, sádico, etc. pero no deja de sorprenderte y eso te engancha. A mí personalmente me estaba creando tensión para saber qué es lo que iba a suceder en el próximo capítulo, eso sin duda es una de las cosas que más me engancha a una serie tener un misterio de que va a pasar y no tanto por un misterio que ocultan los guionistas. 



El protagonista es uno de esos hombres y mujeres que tienen una grave crisis económica, el personaje principal no tiene dinero ni para mantener a su hija, ni para mantener a su madre ya que es un hombre divorciado y vive con ella. Este hombre que es una bala perdida está acosado por esta situación, además le debe dinero a gente peligrosa que van a ir a por él si no paga. Esto hace que se convierta en uno de los miembros de un juego bastante sádico, del que forman parte 456 jugadores, que son trasladados a un recinto cerrado donde tienen que jugar a juegos infantiles, con una gran pega. El que pierde muere y el que gana consigue cantidades ingentes de dinero.


La evolución de los personajes, también es una de las causas que te enganchan. Esta evolución te engancha porque vas viendo como los personajes entienden el juego y entienden a los propios jugadores además de conocer la historia de muchos de ellos.


Por ponerle una pega, lo que menos me gustó de la serie como me suele pasar, fue el final. Para mi gusto el final fue un poco precipitado, algunas cosas no las logré a entender sobre todo una de las escenas finales, que seguramente esté pensada para darle continuidad a la serie.


También, el trasfondo de esta serie o por lo menos lo que pude entender yo, parece ser una crítica al sistema capitalista, una crítica a lo que puede hacer una persona con extrema necesidad para el divertimento de las personas que tienen poder adquisitivo. Y eso es un mensaje muy potente.


Sin nada más que decir, corred a verla y dejen sus comentarios.